jueves, 17 de enero de 2013

Una mañana sin saber lo que ese día podía cambiar su vida salieron jorge y Claudio de la barriada donde residen, esa misma tarde del domingo 13 de enero del 2013 sale a la calle Andrew Reyna con su corta edad y una vida llena de sueños... Quizás recibió la llamada de un amigo o de alguna amiga quien le hablara con cariño, al pasar el día se dispone a salir como todo joven de 22  años junto a su hermano a visitar a sus amigos, quizás a su novia pasando una tarde de risas y afectos, al llegar la noche decide ir a su casa junto a su hermano ubicada en lo que llaman la bajada del ganado, mientras hablaban de lo que paso en el día, reían como de costumbre, pasan Jorge y Claudio abordando una moto y al encontrarse con ellos en la calle Ribas Jorge quien va de copiloto con un gran gesto de crueldad pide de manera violenta con un arma de fuego a Andrew Reyna que le entregue sus pertenecías, Andrew se resiste a entregar su teléfono celular en el mismo momento que Claudio presiona a Jorge diciendo: apúrate! apúrate! antes que alguien llegue, al Andrew escuchar eso con su resistencia al robo y los nervios al ser apuntado con un arma de fuego de las manos de Jorge, comienza a gritar para llamar la atención de alguien lo que produjo que la adrenalina de todos los que están subiera al máximo  mientras el mas gritaba intentando llamar la atención de alguien que interviniera, a Jorge se le encontraba la adrenalina de la posición en la que se encontraba, Claudio grita fuertemente: disparale!!! , hubo un encuentro de gritos que unió la rabia con la adrenalina y dio como resultado que Jorge dispara sin piedad y de esta manera deja moribundo a Andrew sobre el pavimento con un disparo que coloca en corta cuenta regresiva el reloj que da palpitar a su vida,   Jorge aborda nuevamente la moto y Claudio arranca sin importar la agonía que vive el joven en ese momento en el que le pasa toda su vida por sus ojos, el hermano de Andrew como puede lo carga y junto a varios trabajadores de una clínica cercana corren con la esperanza de salvar la vida de este joven muchacho quien entre agonías pensaba en sus seres queridos y en su corazón les decía cuanto les amaba... llega con vida a la clínica en la cual a los pocos minutos la calambrina toco su vida y la marchito.  

PD: La Policía aun no da con los responsables Jorge y Claudio aun están en las calles junto a muchos jóvenes que quieren y merecen vivir,nuestras autoridades deben retomar como principal visión hacer justicia y evitar estas malas acciones con sus patrullajes constantes en lugar de aprovecharse de su autoridad para matracas o ganarse la vida sentados mientras siguen muriendo nuestros muchachos.